Las intoxicaciones alimentarias, lamentablemente, son uno de los motivos más comunes por los que se acude al médico o a urgencias. Estos espacios deben estar preparados para poder llevar a cabo las pertinentes pruebas de laboratorio, tanto de forma propia como con la ayuda de un laboratorio externo. Dentro de este tipo de afecciones hoy queremos hablar de la bacteria campylobacter.
Este tipo de enfermedad es de hecho la transmitida por alimentos más frecuente en la UE, de ahí que sea indispensable detectarla a tiempo y poder ofrecer un tratamiento adecuado, ya que como cualquier intoxicación alimentaria, produce muchas molestias y dolor en el paciente que la sufre. Pese a que no suele convertirse en un problema mayor, si no se trata con cuidado y siguiendo las indicaciones que se den es posible que la situación se agrave.
¿En qué consiste una intoxicación alimentaria?
Antes de abordar la bacteria campylobacter, es importante explicar en qué consiste una intoxicación alimentaria y qué la provoca. Cuando una persona consume un alimento contaminado, el organismo lo interpreta como una amenaza, asimilándolo a una enfermedad transmitida a través de alimentos y bebidas contaminados. Estos alimentos contienen algún germen en mal estado que, al ser ingerido, provoca la aparición de síntomas negativos. Los más comunes suelen ser malestar estomacal, diarrea y vómitos.
Estos síntomas suelen aparecer horas o incluso días después de haber ingerido el alimento contaminado. Normalmente, son leves y la mayoría de las personas se recupera sin necesidad de tratamiento. Sin embargo, es cierto que hay casos en los que una intoxicación alimentaria puede provocar una enfermedad más grave o complicaciones.
Antes de continuar, es importante aclarar que el término «intoxicación alimentaria» se utiliza de forma popular para referirse a casi todas las enfermedades relacionadas con la ingesta de alimentos contaminados. Sin embargo, un profesional de la salud utilizará términos más específicos, como:
Enfermedades de origen alimentario
Hace referencia a todas las enfermedades causadas por alimentos o bebidas contaminados.
Intoxicación alimentaria
Recoge todas las enfermedades provocadas por toxinas presentes en los alimentos. En este caso se dice que es un tipo de enfermedad de origen alimentario.
¿Cómo se contaminan los alimentos?
Los alimentos pueden contaminarse en cualquier etapa, desde su origen hasta llegar a nuestras manos. Este proceso puede comenzar durante el cultivo, la cosecha o captura, el procesamiento, el almacenamiento, el transporte o la preparación. De hecho, que la bacteria campylobacter contamine un alimento puede producirse en cualquier lugar donde se manipule la comida, incluidas las propias casas de los clientes que la han adquirido, por factores como:
Lavado de manos incorrecto
Los restos de heces en las manos después de ir al baño pueden infectar los alimentos, así como otros contaminantes pueden transferirse de las manos al preparar o servir los alimentos.
Falta de desinfección
No limpiar adecuadamente las áreas donde se cocina o se come puede propagar contaminantes. Utensilios como cuchillos y tablas de cortar que no se lavan correctamente pueden funcionar como diseminado para las bacterias y otros agentes patógenos.
Almacenamiento inadecuado
Los alimentos conservados a temperatura ambiente durante demasiado tiempo pueden contaminarse y si se almacenan en el frigorífico pueden caducar, por lo que hay que vigilar siempre la fecha de caducidad y el estado de los alimentos antes de consumirlos.
¿Qué es el Campylobacter?
Esta bacteria forma parte de las formas de intoxicación alimentarias más famosas por ser la responsable de una enfermedad conocida como campilobacteriosis. Con más de 246,000 casos anuales en la UE, esta enfermedad es la más comúnmente transmitida por alimentos en la región. Este tipo de afección es zoonótica, es decir, que puede transmitirse directa o indirectamente entre animales y seres humanos. En el caso de Campylobacter en concreto, los síntomas más frecuentes incluyen fiebre, diarrea y calambres abdominales.
El proceso para adquirir campilobacteriosis generalmente implica la exposición a la bacteria Campylobacter, que se transmite principalmente a través de alimentos contaminados. Eso sí, existen algunos más propensos a ser contaminados por esta bacteria:
Carne cruda o mal cocida
La carne de ave cruda es una fuente común de Campylobacter, ya que la bacteria puede vivir en el intestino de las aves sin causarles daño. Comer carne de pollo, si no se ha cocinado completamente, puede llevar a la ingestión de la bacteria.
Contaminación cruzada
Como hemos comentado arriba, los utensilios de cocina como cuchillos o tablas de cortar que han estado en contacto con carne cruda pueden transferir la bacteria a otros alimentos si no se limpian adecuadamente.
Alimentos preparados
Aquellas comidas listas para el consumo que hayan estado en contacto con pollo crudo o con superficies contaminadas pueden llevar Campylobacter.
Leche cruda
Beber leche no pasteurizada puede ser una fuente de infección si está ya contaminada.
Agua
Beber agua contaminada, especialmente de fuentes no tratadas o mal gestionadas, puede también ser una forma de exposición a Campylobacter.
Contacto con animales infectados
El contacto directo con aves, ganado o con sus excrementos puede transmitir la bacteria.
Tratamiento
El tratamiento de la infección por Campylobacter generalmente se centra en el alivio de los síntomas para que el sistema inmunológico combata la infección. Existen varias formas de ayudarle a vencer esta intoxicación:
Tratamiento general
La diarrea y los vómitos, síntomas comunes de la infección por la bacteria Campylobacter, pueden provocar una pérdida significativa de líquidos y electrolitos. Por ello, es crucial mantener una adecuada rehidratación, bebiendo líquidos claros y soluciones de rehidratación oral para reponer los fluidos perdidos.
Durante la convalecencia, se recomienda seguir una dieta blanda y fácil de digerir, como arroz, plátano o pan tostado, para evitar irritar el estómago. Es importante evitar alimentos grasos, picantes o lácteos hasta que el paciente se recupere completamente. Además, descansar es esencial para permitir que el cuerpo se recupere de la infección.
Tratamiento farmacológico
En la mayoría de los casos la campilobacteriosis se resuelve sin necesidad de antibióticos, ya que el sistema inmunológico suele manejar la infección por sí mismo. Sin embargo, estos medicamentos pueden ser necesarios en casos graves o cuando hay complicaciones. Los más empleados en este caso son azitromicina y ciprofloxacino. Su elección dependerá de la resistencia bacteriana local y de la gravedad de los síntomas.
Aunque a menudo se recomienda evitar medicamentos antidiarreicos en caso de infecciones bacterianas, ya que pueden prolongar la infección al retener las bacterias en el intestino, en algunos casos específicos puede ser útil bajo la guía de un profesional de la salud.
Consulta médica
Las personas con sistemas inmunológicos comprometidos, como ancianos, niños y mujeres embarazadas, deberán buscar atención médica especializada si presentan síntomas de campilobacteriosis.
Aun así, si los síntomas en cualquier paciente son severos, persistentes o se presentan complicaciones como fiebre alta, deshidratación grave o síntomas neurológicos (como debilidad o dificultad para caminar), es fundamental buscar atención médica inmediata. El tratamiento específico dependerá de las recomendaciones del profesional de la salud y de la gravedad de la infección.
Prevención
Como Campylobacter se transmite por el consumo de alimentos contaminados por esta bacteria, es posible realizar acciones de prevención por parte de la ciudadanía y de las empresas que manipulan esos alimentos. La higiene y el cuidado siempre ayudarán a evitar transmitir la bacteria a otras piezas de comida, aunque siempre es preferible erradicarla de 0. Algunas medidas que se pueden llevar a cabo son:
Cocinar los alimentos
Es preciso asegurarse de cocinar la carne de ave a una temperatura interna de al menos 75°C para matar cualquier bacteria presente.
Manipulación segura de los alimentos
En casos de intoxicación alimentaria, como el que puede causar la bacteria Campylobacter, es crucial lavarse bien las manos, los utensilios de cocina y las superficies después de manipular carne cruda. Además, es recomendable utilizar tablas de cortar separadas para la carne cruda y otros alimentos para evitar la contaminación cruzada.
Higiene en la cocina
Es imperativo mantener una buena higiene general en la cocina, incluyendo la limpieza regular de superficies y utensilios.
Evitar la leche no pasteurizada
Los profesionales de la salud siempre recomendarán, salvo en casos específicos, el consumo de leche pasteurizada en lugar de leche cruda para garantizar una mayor seguridad alimentaria.
Agua
Los pacientes deben asegurarse de beber agua tratada y segura, evitando fuentes potencialmente contaminadas o de las que desconozcan su origen.
El papel de la UE
Dado que Campylobacter es una de las bacterias que más contaminan a las personas en la UE, esta institución ha decidido adoptar un enfoque integrado de la seguridad alimentaria, que abarca desde la granja hasta la mesa. En este caso se genera una evaluación del riesgo y la adopción de medidas de gestión del mismo. La comunicación de estos de manera eficaz es fundamental para este enfoque, por lo que la EFSA (autoridad europea de seguridad alimentaria) proporciona a los consumidores apoyo y asesoramiento científico independiente sobre la seguridad alimentaria de Campylobacter. Su labor incluye recopilar y analizar datos sobre la prevalencia de esta bacteria, evaluar los riesgos que plantea y asesorar sobre posibles opciones de control y mitigación.
Para ello se necesitan laboratorios especializados que sean capaces de analizar muestras de este tipo y localizar el problema. Por eso en Ambar Lab trabajamos para que nuestro amplio y creciente catálogo de pruebas responda a estos interrogantes, pues sabemos que el conocimiento es la llave que facilita el trabajo de nuestros clientes. Si quieres saber más sobre nuestros servicios, solamente tienes que ponerte en contacto con nuestro equipo. ¿Hablamos?
